Con espíritu de fe y esperanza, dimos inicio al año laboral 2025 con la celebración de la Santa Misa en Acción de Gracias, encomendando a Dios todas las bendiciones que confiamos recibir a lo largo de este año. Este acto de fe marcó el inicio no solo de un nuevo ciclo anual, sino también de un quinquenio lleno de oportunidades para seguir trabajando por el bienestar de quienes más lo necesitan.

La ceremonia, cargada de emotividad y recogimiento, nos permitió reflexionar sobre la importancia de nuestro quehacer diario y renovar nuestro compromiso con los programas de apoyo social que impulsamos. Después de un merecido descanso para celebrar las fiestas navideñas y de fin de año junto a nuestras familias, volvernos a reunir como equipo fue motivo de alegría y gratitud.

Confiamos en que, guiados por la divina providencia, nuestras fuentes de empleo se mantendrán y crecerán bajo condiciones dignas, permitiéndonos impactar positivamente en la vida de muchas personas. Pedimos a Dios que este nuevo año sea de oportunidades, crecimiento y solidaridad, y que juntos podamos ser instrumentos de amor y esperanza en cada labor que emprendamos. Bienvenido, 2025.

TODOS SOMOS AGAPE